Nueva York .- Un tercio de los niños del mundo, unos 800 millones en total, están intoxicados con plomo, una neurotoxina que puede causar daños irreparables en el cerebro, según alerta un informe publicado por Unicef y la ONG Pure Earth.
El estudio asegura que 1 de cada 3 niños tiene niveles de plomo en sangre iguales o superiores a 5 microgramos por decilitro, el nivel en el que se considera necesario actuar.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), incluso los niveles más bajos de plomo pueden estar vinculados a una menor inteligencia, dificultades de comportamiento y problemas de aprendizaje en menores.
Aunque el problema se da en todo el mundo, las zonas más afectadas a día de hoy son los países con pocos recursos. Casi la mitad de esos 800 millones de niños intoxicados viven en la región de Asia Meridional.
El estudio, el primero que se efectúa a esta escala según sus autores, concluye de forma inequívoca que niños en todo el mundo están resultando “envenenados a una escala masiva y previamente no reconocida”.
El plomo, un metal pesado muy utilizado desde la antigüedad para una gran variedad de aplicaciones, genera una potente neurotoxina que resulta especialmente dañina para niños y, sobre todo, para los menores de cinco años.
A esas edades, en las que el cerebro no se ha desarrollado plenamente, la sustancia puede causar un deterioro neurológico, cognitivo y físico para toda la vida.
Numerosos estudios han vinculado la exposición infantil al plomo con problemas de salud mental y de comportamiento y con un aumento de la delincuencia y la violencia.
En el caso de los niños de más edad y los adultos, se considera que una exposición prolongada al plomo aumenta el riesgo de problemas de salud, incluidas complicaciones cardiovasculares y renales. EFE